Señales para saber que tu baño necesita una reforma

Indice de contenidos:

• Decoración anticuada
• Cambio de necesidades
• Desperfectos evidentes
• Aumentar el valor de la casa
• Ausencia de elementos funcionales
• No cuenta con sistemas de ventilación
• No dispone de calefacción

¿Cada vez que entras al baño de tu casa te quedas mirando alrededor y no te acaba de convencer lo que ves? Es posible que a este espacio de la vivienda le haga falta una reforma y también es probable que no sepas de qué forma o a qué nivel. Para responder a estas cuestiones es muy importante estar atento a algunas señales que nos indican si debemos acometer una obra completa o cambiar algunas partes del cuarto de baño.

Teniendo en cuenta que se trata de una de las estancias donde es preciso disponer de una serie de comodidades básicas, es fundamental emprender las reformas necesarias para que este espacio sea lo más confortable posible. No olvidemos que el baño es el sitio donde nos preparamos para comenzar la jornada pero al mismo tiempo es el lugar donde podemos relajarnos al final del día tomando una ducha.

Decoración anticuada

El baño es una de las estancias más utilizadas de cualquier vivienda, por lo que al igual que el salón o el dormitorio, debe contar con una decoración que nos agrade. En el caso de que el inmueble sea demasiado antiguo y nunca se haya reformado el cuarto de baño, es hora de poner fin al alicatado que recuerda a otras épocas pasadas y a los sanitarios y muebles poco o nada funcionales. La actualización de la apariencia del baño es clave para sentirse completamente a gusto en casa.

Cambio de necesidades

Ya sabemos que con el paso del tiempo, las necesidades de una persona o una familia van cambiando, por lo que puede suceder que la organización del cuarto de baño que en un principio se ideó, en la actualidad ya no resulte práctico. Una de las reformas más importantes que se realizan en este sentido consiste en el cambio de bañera por plato de ducha o viceversa, así como la colocación de un doble lavabo.

Desperfectos evidentes

El baño no sólo debe ser un lugar confortable, sino sobre todo seguro. Es probable que con el uso vayan apareciendo algunos daños, ya sea en los sanitarios, los grifos, las paredes o el suelo. En el caso de que las consecuencias de estos desperfectos alteren su uso habitual es recomendable realizar las reformas precisas cuanto antes.

Además, también hay que considerar que algunas averías no sólo ponen en riesgo la integridad de sus habitantes, sino que en el caso de que se produzcan fugas de agua por ejemplo, supone un gasto excesivo y pueden perjudicar a otras partes de la vivienda.

Aumentar el valor de la casa

Si estás pensando en vender o alquilar tu vivienda, posiblemente sea necesario reformar el baño para incrementar su valor total. Es obvio que una casa recién reformada tiene más posibilidades de venderse o arrendarse en un menor tiempo y a un precio más alto.

Ausencia de elementos funcionales

Como hemos comentado antes, un baño debe ser un espacio cómodo debido a su continuado uso. Por ello, es recomendable que cuente con los muebles, estanterías y otro mobiliario adecuados para colocar y guardar todos los utensilios que se utilizan a diario. Se trata de una inversión no demasiado elevada que permite disfrutar de este espacio con una mayor organización y desahogo.

No cuenta con sistema de ventilación

Todos los cuartos de baño deben contar con una ventana a alguna zona exterior o en su defecto, con un extractor para ventilar el espacio. De esta forma, no sólo se eliminan los malos olores, sino que además se previene la formación de humedades y moho como consecuencia de la condensación del agua que se produce durante las duchas.

No dispone de calefacción

Del mismo modo que otras estancias de la casa, el baño también debe contar con un radiador o cualquier otro dispositivo de calor. Una de las soluciones más demandadas en los últimos tiempos consiste en la instalación de un radiador toallero para mantener el espacio a una temperatura agradable y secar las toallas para que no se estropeen.

En el caso de que tu baño reúna varios de estos puntos, sin duda necesita una reforma para adaptarlo a los nuevos tiempos. Sin embargo, conviene tomarse el tiempo necesario para planificar la obra y adecuar el nuevo espacio a las preferencias y necesidades personales, evitando dejarse llevar por las últimas tendencias que copan las revistas de decoración y que en muchas ocasiones no resultan prácticas para el uso diario.

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