Revestimiento de paredes con madera

Índice de contenidos:

• Revestimiento de paredes con madera
• Tipos de revestimientos de madera
• Ventajas de la madera en el revestimiento de paredes
• Consejos para colocar revestimiento de madera en las paredes

Revestimiento de paredes con madera

La madera, así como los materiales que imitan su estética, son una de las opciones más demandadas en el diseño interior de las viviendas. Su uso es tan amplio que llega incluso a utilizarse como revestimiento de las paredes para crear un ambiente agradable. Este recurso es una solución muy versátil con la que se consiguen diferentes estilos, ya sea clásico, elegante o rústico.

En muchas ocasiones, el tipo de revestimiento de las paredes es la base que define la decoración en una casa, pero, además, permite delimitar los diferentes ambientes de cada espacio. Pese a que normalmente se utiliza la pintura en este tipo de superficies, la madera es una alternativa que resulta muy interesante, llegando incluso a cubrir también los techos, donde se utiliza una tonalidad distinta para crear contraste.

Tipos de revestimientos de madera

Algunos de los tipos de revestimientos de madera para paredes más comunes son los siguientes:

• Machihembrados: en este caso se utilizan tablas de madera previamente tratadas para conseguir que encajen a la perfección, las cuales presentan un acabado de barniz.
• Laminados: se trata de lamas preparadas para cubrir las superficies que pueden incorporar un sistema de clic para facilitar su instalación. Existe una amplia gama de diseños, de forma muy similar a lo que sucede con los suelos laminados.
• Con paneles: es una de las maneras más sencillas de revestir una pared con madera, ya que solo hay que colocar los tableros en vertical.

El resultado final varía según la modalidad que se elija, así como el coste que está directamente relacionado con la calidad de la madera y la forma de instalación. A grandes rasgos, el precio de estos revestimientos oscila entre 30 y 90 euros por metro cuadrado.

En espacios interiores es posible decantarse por madera procedente de especies que tienen una densidad media o media – baja. Sin embargo, cuando es necesario recubrir una pared que se encuentra en el exterior, es preferible elegir un árbol más resistente, cuya materia prima debe ser tratada para potenciar su durabilidad natural frente a la humedad, los cambios de temperatura, la incidencia del sol, la acción de los insectos, etc.

Ventajas de la madera en el revestimiento de paredes

La madera no solo consigue crear un ambiente cálido y confortable en el interior de las viviendas, sino que también aporta otras ventajas:

• Actúa como barrera frente a los cambios de temperatura que se producen en el exterior.
• Funciona como aislante acústico frente a los ruidos que tienen lugar en los inmuebles contiguos.
• El amplio catálogo de maderas que se puede encontrar en el mercado permite adaptar el revestimiento a cada tipo de decoración y ambiente.
• En comparación con otros tipos de recubrimientos, la madera se coloca de una forma más rápida y sencilla, sin necesidad de realizar grandes reformas.

Pese a que algunos tipos de revestimientos de madera pueden llegar a ser muy caros, en su lugar es posible decantarse por láminas o paneles que imiten la misma estética. De esta manera no solo se consigue un importante ahorro, sino que también se facilita la tarea de limpieza, ya que en estos casos no es preciso procurar unos cuidados especiales.

Consejos para colocar revestimiento de madera en las paredes

Si se decide revestir las paredes de una casa con madera, es importante tener en cuenta algunos aspectos:

• La pared que se va a recubrir debe estar libre de cualquier resto de humedad. Si existe este problema, es necesario solucionarlo antes de colocar la madera o, en caso contrario, se deteriorará tanto la pared como el revestimiento.
• Es recomendable considerar el espacio de la habitación antes de decidir revestir todas las paredes porque puede resultar muy cargante si los metros cuadrados son reducidos. Una opción muy interesante es colocar madera solo en uno de los lados para poner el acento respecto al resto de la decoración o bien utilizar el revestimiento solo hasta media altura.
• Si se trata de madera natural, es necesario lijar la superficie cada cierto tiempo para renovar el acabado. Asimismo, se debe evitar aplicar productos de limpieza demasiado abrasivos y utilizar agua en abundancia.

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