¿Qué es un cronotermostato?

Publicado el : 16/10/2019 12:45:04
Categorías : Calefaccion , Construcción

 cronotermostatos

 

Indice de contenidos:

 

Durante los largos y fríos días de invierno, el termostato es un aparato del que se suele hablar de forma frecuente al tratar el tema de la calefacción. Sin embargo, existe otro dispositivo que no es tan conocido y que también tiene una función muy interesante a la hora de ahorrar en la factura mensual haciendo un uso más eficiente del sistema de calor. Estamos hablando del cronotermostato.

Los termostatos nos resultan muy familiares porque son los dispositivos con los que se regula la temperatura de una casa. Normalmente están ubicados en una o varias estancias y adoptan la forma de ruleta para subir o bajar los grados, aunque en los últimos tiempos se pueden encontrar termostatos digitales con pantalla.

Partiendo de esta base, el cronotermostato va más allá y entre sus funcionalidades no solo se encuentra la posibilidad de ajustar la temperatura, sino que también se puede programar su encendido y apagado a determinadas horas. De este modo se puede controlar la calefacción según las necesidades de cada momento y el frío que haga en cada franja horaria. El resultado es la mejora de la eficiencia energética en el hogar que deriva en un ahorro importante.

 

Particularidades en el uso de un cronotermostato

A diferencia de los termostatos, los cronotermostatos son unos aparatos más complejos que permiten hacer un uso de la calefacción más preciso. Aunque normalmente suelen estar asociados a las calderas de gas, también se pueden utilizar en las estufas de pellets u otros sistemas eléctricos.

En algunos casos puede resultar difícil de manejar, pero los modelos actuales están diseñados para que cualquier usuario pueda realizar una programación sencilla. Incluso en este supuesto, es necesario conocer algunos conceptos para sacar el máximo partido a este dispositivo: por un lado, se encuentra la temperatura de inercia y por otro, la temperatura de confort.

Tal como se intuye, la primera hace referencia a los grados a los que suele estar la casa en invierno y la segunda a la temperatura que se debe alcanzar para estar cómodos en la vivienda sin pasar frío ni calor. Aunque no es recomendable seleccionar por encima de los 21 grados, en cada casa se deben tener en cuenta algunos aspectos, como el tipo de aislamiento en las ventanas y puertas, la orientación del inmueble, el grosor de las paredes, las condiciones climatológicas del exterior, etc.

Con 21 grados se puede disfrutar de un ambiente cálido sin comprometer el consumo, pero cada espacio tiene sus propias circunstancias. Por ello, se debe calcular la temperatura intermedia entre la de inercia y la de confort. Para controlar el gasto de energía, la diferencia entre una y otra no debe ser superior a 5 grados o de lo contrario es probable que la factura de la luz o gas se dispare.

 

¿Cómo utilizar bien un cronotermostato?

Lo más recomendable es programar el cronotermostato para que la calefacción se apague de forma automática por la noche, un rato después de irse a dormir. Una vez en la cama con la ropa de invierno, no es necesario mantener la calefacción encendida para descansar de forma confortable.

Del mismo modo, es interesante planificar el cronotermostato para que la calefacción se ponga en marcha media hora antes de levantarse. De esta forma, la vivienda estará caldeada mientras se realizan las actividades cotidianas de la mañana. Igualmente, se puede hacer lo mismo unos minutos antes de llegar a casa después del trabajo. De esta manera se consigue ahorrar hasta un 25% a final de mes en el consumo de electricidad.

No hay que olvidar que el funcionamiento básico del cronotermostato, al igual que el de un termostato, se consigue a través de la conexión a una caldera o estufa para que sea posible activar o apagar el sistema de calor, así como liberar más o menos energía en función de la temperatura seleccionada.

 

Share