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Después de la temporada de baño, transcurren muchos meses hasta que las temperaturas vuelven a subir. Durante el invierno también es necesario mantener las piscinas para encontrarse el agua en buenas condiciones en la siguiente temporada y evitar tener que cambiarla. En este sentido, la mejor solución es colocar una cubierta.
Por suerte, hoy en día existen multitud de sistemas para tapar una piscina que se adaptan a la perfección a todos los tipos y las necesidades de cada caso. De esta manera no sólo es posible proteger el interior de los efectos de la intemperie, sino que este recubrimiento también cumple otra serie de funciones según su diseño y composición.
Ventajas de las cubiertas para piscinas
- El principal beneficio de este tipo de coberturas es aislar la piscina de cualquier agente externo al que se pueda ver expuesta durante la temporada en que no se utiliza. De esta manera, los trabajos de limpieza en el próximo verano serán mucho más rápidos y sencillos, sin necesidad de cambiar el agua con el consiguiente ahorro que ello supone.
- En función del fabricante elegido, la cubierta se puede utilizar para otros fines como por ejemplo mantener la temperatura en una piscina climatizada o complementar la decoración según la forma y el diseño elegidos.
- Se posicionan como un elemento de seguridad, sobre todo en aquellas viviendas o chalets donde hay niños o mascotas que suelen corretear alrededor. De esta forma se evita que puedan caer al agua helada y producirse un ahogamiento o un problema de salud.
- Colocando una cubierta para piscinas durante los meses de más frío se consigue alargar la vida útil de la depuradora, ya que se reduce el trabajo que ésta debe realizar para retirar el polvo, tierra, hojas, etc.
- Del mismo modo, el ahorro en productos de limpieza y desinfección también es considerable. Dado que el agua se mantiene limpia con un recubrimiento, no es necesario utilizar estos líquidos en la misma medida para mantener su calidad.
- Teniendo en cuenta que las fundas para piscinas permiten conservar el agua del verano anterior, nos encontramos con la mejor solución para no derrochar este líquido en las épocas de sequía cuando se ponen en marcha medidas bastante estrictas para regular este tema.
- Este tipo de cubiertas también contribuyen a prevenir que una gran cantidad de agua se evapore. Por lo tanto, si fuera necesario llenar el depósito en la siguiente época estival, los litros que se necesitan son mínimos en comparación con completarlo desde cero.
Inconvenientes de las cubiertas para piscinas
- El elevado precio de este tipo de cubiertas es la principal desventaja, aunque varía en función del tamaño de la piscina y del material elegido. Aun así, conviene realizar esta inversión porque el ahorro de tiempo, esfuerzo y dinero se compensa a largo plazo.
- La instalación de un recubrimiento no suele ser una tarea sencilla, ya que además de contar con el espacio suficiente en alguno de los laterales del estanque, también es importante tomarse el tiempo necesario para colocarlo correctamente o de lo contrario, la suciedad puede colarse por los recovecos.
- En la mayoría de las ocasiones es preciso adquirir también algún instrumento para ayudar en el proceso de colocación y desmontaje, como por ejemplo unos rodillos que permiten extender la lona fácilmente y añadir la tensión necesaria.
Por último, para elegir la mejor cubierta es imprescindible tomar las medidas correctas de la piscina para asegurarse de que la tapará por completo. Si la pileta está construida de obra, será preciso contar también el borde de la misma. Junto con ello, es necesario tener en cuenta el clima del lugar para elegir el material adecuado en función de si las temperaturas son suaves durante todo el año o si son extremas entre unas épocas y otras. ¿Crees que estas cubiertas son algo indispensable para mantener la piscina o utilizas otros métodos?