Plantas para sembrar en verano

Índice de contenidos:

• Plantas para sembrar en verano
• Petunia
• Geranio
• Dalia
• Pensamiento
• Lavanda
• Clavel moro
• Tomatera
• Lechuga
• Berenjena
• Espinaca

Plantas para sembrar en verano

Lejos de lo que se tiende a pensar, el verano es la época perfecta para sembrar determinadas plantas decorativas y vegetales que después se pueden utilizar en la cocina. Las altas temperaturas y la escasez de lluvias no son un impedimento para poblar el jardín o el huerto domésticos.

Cada vez son más las personas que se animan a tener un rincón natural en sus casas. Además de ser una afición agradable, no es necesario invertir demasiado dinero para poner en práctica algunos principios básicos. Por ello, es interesante habilitar un espacio para ello y aprovechar cualquier época del año para experimentar en el mundo de la jardinería.

Petunia

Es una de las plantas por excelencia para sembrar en verano debido a su estética colorida y su variedad de aromas. Es una especie de exterior que desarrolla una gran cantidad de flores durante la primavera y el verano. Además, es posible disfrutar de sus hojas verdes durante todo el año.

La petunia necesita un riego abundante a diario, sobre todo durante la época estival, aunque se debe evitar tocar las flores con el agua. En cuanto a la ubicación, se debe colocar en una zona donde reciba la luz directa del sol y la temperatura alta sea constante.

Geranio

En lo que a plantas se refiere, el geranio suele ser sinónimo de estío. Gracias a su gran variedad de colores, tan solo hay que elegir los que mejor encajen con el entorno para realzar los balcones, las terrazas, las ventanas o cualquier espacio que se encuentre a la intemperie.

El geranio se caracteriza por ser una planta bastante resistente, por lo que no necesita demasiados cuidados para mantenerse espléndida. Tan solo se debe ubicar en un lugar con mucha luz, aunque si la temperatura es muy alta, se debe resguardar durante las horas más fuertes de sol. Asimismo, hay que regar dos veces a la semana, garantizar un buen drenaje y añadir un fertilizante para floración al menos una vez al mes.

Dalia

La dalia es otra planta que se puede sembrar en verano y que más llama su atención por sus originales flores. También conocida como la diva del jardín, proviene de México, por lo que las altas temperaturas y la incidencia del sol no suponen ningún problema para su crecimiento. Si se prefiere, también se puede ubicar en espacios interiores, sobre todo durante la época de invierno para protegerla del frío y el viento.

Es recomendable colocar esta especie en un sitio donde reciba los rayos solares de forma directa, preferiblemente en el suelo en lugar de una maceta. Respecto al riego, se debe echar agua en abundancia, aunque es importante asegurar que cuenta con un buen drenaje y una tierra con los nutrientes necesarios.

Pensamiento

Esta flor se puede encontrar en un amplio abanico de variedades, con diferentes colores y tamaños. Son especialmente llamativas y no necesitan demasiados cuidados para lucir resplandecientes. Además, tienen la ventaja de que se pueden sembrar durante todo el año y sorprender con su estética en cualquier estación.

Para disfrutar con total plenitud de los pensamientos es preciso elegir una ubicación con luz natural, evitando los espacios interiores sin ventilación y las zonas con climas extremos. En cuanto al riego, es preciso agregar agua de forma moderada, aproximadamente cada dos semanas o dos veces a la semana si está floreciendo.

Lavanda

La lavanda o lavándula es una planta de color violeta que desprende un aroma irresistible. Dado que su olor consigue crear un ambiente muy agradable, se puede aprovechar el verano para sembrarla en una maceta. Más allá de su aspecto delicado, tiene la capacidad de crecer en los terrenos y bajo las condiciones menos favorables, por lo que no es necesario llevar a cabo unos cuidados demasiado complicados.

Para disfrutar de esta planta, se debe tener en cuenta que aguanta de forma estoica la ausencia de agua. Por lo tanto, es necesario echarle agua de forma moderada, sobre todo durante los meses de crecimiento, sin llegar a mojar las ramas ni las flores. Si la temperatura es alta, basta con hacerlo una vez a la semana. Además, no es preciso añadir abono si la calidad de la tierra donde está plantada es aceptable.

Clavel moro

Los claveles moros, tagetes o clavelones son unas plantas que presentan flores de color amarillo o naranja, así como unas hojas que pueden llegar a crecer hasta 5 centímetros de largo. Su aspecto es muy similar a las margaritas y es posible encontrar más de 60 especies distintas.

Para conseguir que el clavel moro desarrolle todo su potencial en verano se recomienda regarlo 3 veces a la semana, aunque esta periodicidad puede ser mayor o menor en función del clima donde esté ubicado. Para orientarse sobre cuándo es necesario efectuar el riego, es importante observar su posición: si está inclinado significa que tiene déficit de agua y si se encuentra en vertical, se entiende que cuenta con la cantidad suficiente.

Tomatera

El verano no solo es una época excelente para sembrar plantas con las que decorar el espacio, sino que también se puede utilizar el terreno disponible para plantar hortalizas, como por ejemplo el tomate. Este es uno de los vegetales más consumidos en todos los hogares y aún más durante los meses de calor.

Lo más recomendable es sembrar las semillas a finales de la primera para conseguir recoger los frutos durante la época estival. Con el objetivo de obtener una cosecha importante, es necesario colocar la tomatera en un lugar donde reciba una gran cantidad de sol y regarla de manera continua.

Lechuga

La lechuga es otra planta que se puede cultivar en un huerto doméstico para completar una rica ensalada. Dado que existe una amplia gama de este vegetal, se deben elegir las semillas del tipo que mejor encaje con los gustos culinarios. Al igual que en el caso de los tomates, también se recomienda sembrar la lechuga a finales de primavera o principios de verano.

Entre los cuidados que necesita esta especie se encuentran básicamente un lugar con semisombra, procurando que no llegue el sol de forma directa, así como un riego abundante. Siguiendo estos consejos es posible realizar la recolecta una vez transcurridos dos meses.

Berenjena

La berenjena es uno de los alimentos más versátiles en la cocina, por lo que nunca está de más tener una plantación de este tipo. Además de la hortaliza, también se desarrollan unas flores fascinantes de color violeta claro en forma de estrella.

Esta planta necesita como cuidados básicos que los rayos del sol le alcancen de forma directa, por lo que es importante buscar un emplazamiento con un reducido número de horas de sombra al día. En cuanto al riego, es aconsejable echar agua una vez a la semana, aunque cuando comienza a florecer, se debe reducir la frecuencia y hacerlo cada dos días. Para conseguir que crezca con total plenitud, es conveniente plantar la berenjena en la tierra directamente, ya sea durante la primavera o a principios de verano.

Espinaca

La espinaca es otra verdura que se puede plantar en la época estival, ya que su resistencia la convierte en apta para sembrarse en cualquier estación del año. No obstante, conviene tener cuidado con las temperaturas extremas, tanto frías como cálidas, para que se desarrolle sin ningún daño.

Una vez transcurrido un mes aproximadamente desde el momento de la plantación, se debe recoger el fruto, antes de que se llegue a estropear. Lo ideal para conseguir buenos resultados es elegir una zona entre sol y sombra, así como regar de forma regular para que mantenga una humedad continua.

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