Los trabajos más conocidos de la jardinería suelen ser la plantación, el riego, la poda, la pulverización de productos químicos, la retirada de hojas secas, etc. Sin embargo, existen otras tareas menos conocidas que necesitan herramientas específicas, como es el caso del desbrozado.
Esta acción consiste literalmente en quitar la broza, es decir, las hojas, las ramas y otros desechos de las plantas y los árboles. Si se cuenta con un jardín o con un terreno sembrado, es necesario eliminar la maleza de forma constante para mantener el espacio lo más limpio posible. Para ello, el mejor aparato que se puede utilizar es una desbrozadora, también conocida como rebordeadora o motoguadaña.
¿Qué es una desbrozadora?
Una desbrozadora es una máquina que se emplea en jardinería para cortar todo tipo de hierbas del suelo. Estos aparatos funcionan con motores eléctricos o de gasolina con diferentes tiempos. En cualquier caso, incluye una serie de discos con cuchillas o hilos fabricados de un material cortante para efectuar el tajo con total eficacia.
Los usos que puede tener una desbrozadora, además de eliminar las malas hierbas, son:
Retirar los pequeños arbustos del jardín.
Desbrozar superficies más extensas, como los montes.
Sanear las zonas más recónditas donde no es posible llegar con un cortacésped.
Triturar y prensar las hierbas, ramas y demás maleza después de haber realizado el corte.
Cortar el césped en diferentes alturas según las necesidades.
Si incluye la función de motosierra, también se puede utilizar para cortar árboles y ramas más fuertes.
Los modelos con brazo telescópico permiten recortar los árboles que se encuentran a una mayor altura.
Teniendo en cuenta la posibilidad de llevar a cabo todas estas funciones, adquirir una desbrozadora es sinónimo de trabajar de una manera mucho más ágil y cómoda. Además, el diseño ergonómico de esta herramienta permite operar sin demasiadas complicaciones, minimizando la dificultad que entraña su peso.
Tipos de desbrozadoras
Aunque en el mercado es posible encontrar una amplia gama de desbrozadoras con diferentes precios, lo más conveniente es tomar una decisión según el uso que se le vaya a dar. En la actualidad, existen modelos que están fabricados de forma específica para cortar cada tipo de vegetación. Además, se debe considerar la densidad de las plantas y las funciones principales que se pretendan realizar.
Los principales tipos de desbrozadoras son:
Desbrozadoras eléctricas: este modelo es la mejor opción para los aficionados a la jardinería que buscan una herramienta para cortar la hierba del suelo. Dado que incluyen un motor eléctrico, su potencia es más limitada que las desbrozadoras de gasolina y, por lo tanto, se utilizan sobre todo para cortar hierba. En cambio, se trata de una máquina más ligera y más cómoda desde el punto de vista del ruido y las vibraciones que emite al funcionar. Los modelos con batería son la opción más viable en lugar de los que necesitan estar conectados a la corriente eléctrica.
Desbrozadoras de gasolina: las desbrozadoras que incluyen un motor de gasolina suelen ser de 2 o 4 tiempos y son perfectas para quienes se dedican a la jardinería de un modo más profesional, ya que se pueden utilizar en cualquier tipo de vegetación. Por norma general, la potencia del propulsor y la autonomía es mayor que en el caso anterior, lo que permite que se pueda utilizar en cualquier función. Como contrapartida, el ruido y las vibraciones son más molestas, a lo que se suma también un peso superior. Normalmente, este tipo de desbrozadoras se suelen utilizar en zonas extensas, así como en bosques con árboles.
Precauciones a la hora de utilizar una desbrozadora
Cualquier persona que utilice una desbrozadora debe estar equipada con un casco de protección, ropa resistente a los cortes, protectores para los ojos y oídos, guantes acolchados y antideslizantes, y botas de seguridad.
Durante el tiempo que está funcionando esta herramienta no puede haber nadie alrededor, sobre todo en la parte delantera, para prevenir posibles accidentes.
Se debe evitar encender la desbrozadora en espacios interiores.
Es imprescindible retirar la protección del disco de corte antes de activar la máquina.
Antes de poner en marcha el aparato, se debe comprobar que no hay ningún elemento alrededor que se pueda dañar y asegurarse de que está bien sujeta con las manos.
Después de cada uso, se debe limpiar la máquina para eliminar todos los restos que hayan quedado acumulados y limpiar los filtros de aire para garantizar una durabilidad superior.