Errores al decorar un piso pequeño.

Indice de contenidos:

• Tonalidades oscuras.
• Decorar como si se tratara de una mansión.
• No aprovechar todos los rincones.
• Exceso de decoración y de pertenencias.
• Espacios para un único uso.
• Impedir que entre la luz del sol.
• Misma luz para todas las estancias.
• Combinar diferentes estilos.
• Construir paredes para dividir espacios.
• Desaprovechar la superficie de las paredes.

En la actualidad y sobre todo en las grandes ciudades, encontrar un piso con más de 100 metros cuadrados se convierte casi en una misión imposible. No sólo por el precio desorbitado tanto de los alquileres como de las ventas, sino porque para aprovechar al máximo el espacio urbano disponible, las viviendas suelen tener un tamaño reducido.

Si estás pensando que decorar un piso pequeño es sencillo porque las zonas que hay que adornar son mínimas, lo cierto es que al realizar esta tarea se suelen cometer bastantes errores. Aplicar el ingenio y tener en cuenta algunas recomendaciones básicas es fundamental para obtener excelentes resultados en cuanto a amplitud, iluminación y funcionalidad.

Tonalidades oscuras.

Aunque en el momento de decorar tu piso de reducidas dimensiones el marrón chocolate sea la última tendencia, no olvides que los colores oscuros tienden a crear una sensación de agobio. A la hora de pintar las paredes es preferible decantarse por tonos claros y suaves, como por ejemplo blanco, beige, gris claro o crema. Además de parecer más espaciosa, con este recurso la vivienda ganará en luminosidad.

Decorar como si se tratara de una mansión.

Uno de los errores más comunes que se suele cometer al decorar un piso pequeño es el hecho de no aceptar el tamaño real que tiene la vivienda. Antes de comprar los muebles y demás elementos, conviene analizar el espacio disponible de la casa. Cuando el espacio es limitado, es preferible optar por la funcionalidad de la vivienda y adquirir el mobiliario que mejor se ajuste.

No aprovechar todos los rincones.

Cuando vivimos en una casa pequeña, cualquier espacio se puede utilizar para algo, como por ejemplo para colocar un mueble o guardar algún elemento. No olvides optimizar al máximo los rincones, los espacios encima de los armarios, la altura de las paredes o el hueco de la escalera.

Exceso de decoración y de pertenencias.

En el momento de habilitar espacios pequeños hay que tener mucho cuidado con no colocar demasiados elementos decorativos para no generar un ambiente incómodo y atosigador. Asimismo, hay que tener en cuenta que en una vivienda reducida solo debemos almacenar aquellos bienes que sean imprescindibles para contribuir a la amplitud y al orden de la casa.

Espacios para un único uso.

Si no contamos con los suficientes metros cuadrados para dar a cada zona un uso diferente, no podemos olvidar hacer una distribución para que una misma área tenga diferentes usos. Así, en el caso de que la habitación y el salón tengan que compartir espacio, nada mejor que utilizar un mueble o un biombo para diferenciar una y otro. Lo mismo sucede con el comedor que también se puede aprovechar como zona de trabajo si se eligen los muebles multifuncionales adecuados.

Impedir que entre la luz del sol.

En el caso de que el piso cuente con ventanas o balcones al exterior, procura no colocar cortinas gruesas o cualquier otro elemento que dificulte la entrada de luz natural al interior. De esta forma se consigue aportar mayor luminosidad al espacio y éste parecerá más amplio.

Misma luz para todas las estancias.

Aunque se trate de un piso pequeño, es recomendable que cada zona esté iluminada según su utilidad. Un error bastante extendido se basa en colocar un solo punto de luz para toda la vivienda, pero lejos de esta práctica, para ayudar a delimitar las diferentes estancias y crear el ambiente adecuado en cada una de ellas, se pueden colocar diferentes lámparas, ya sean de pie, en la pared o sobre una mesa, aunque siempre procurando que no sean demasiado grandes.

Combinar diferentes estilos.

Continuando con la máxima de “menos es más” y para sacar el máximo partido a un piso pequeño, conviene olvidarse de mezclar varios estilos decorativos. Es preferible centrarse en uno concreto, a ser posible sencillo y minimalista para no recargar el espacio.

Construir paredes para dividir espacios.

La mejor solución para aprovechar todo el espacio de una vivienda reducida es tirar las paredes y crear un piso diáfano. En los espacios que queramos que estén cerrados, podemos decantarnos por las puertas correderas que son más prácticas para estos casos que las habituales.

Desaprovechar la superficie de las paredes.

Las paredes de un piso pequeño son como un lienzo en blanco. Si queremos aportar un toque original a nuestra casa, podemos utilizar esta superficie para colocar un papel pintado, una estantería o un espejo que además contribuirá a incrementar la luminosidad de la estancia.

Una vez solventados los principales errores que se suelen cometer a la hora de decorar una casa pequeña, no hay que olvidar que un hogar con esas características ofrece multitud de ventajas, como por ejemplo la facilidad a la hora de limpiarlo o los reducidos costes de mantenimiento.
Independientemente del tamaño del piso, nunca hay que olvidarse de la decoración. ¿Qué otros consejos aplicarías para que una casa pequeña tenga personalidad sin renunciar a la comodidad?