Consejos de seguridad para chimeneas de leña

Publicado el : 27/04/2021 14:08:40
Categorías : Calefaccion , Construcción

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Consejos de seguridad para chimeneas de leña

Antiguamente, las chimeneas de leña eran la principal opción que se utilizaba para calentar los hogares. Con el paso de los años fueron relegadas a un segundo plano debido al uso de otros sistemas de calefacción más avanzados. Sin embargo, en la actualidad han vuelto a convertirse en un elemento muy popular en el interior de las nuevas construcciones.

Cada vez es más habitual encontrar las tradicionales chimeneas en casas nuevas, donde cumplen una función decorativa y, al mismo tiempo, de climatización. Muchas personas apuestan por instalar este sistema para darle un toque más hogareño al espacio, sobre todo en el caso de las cocinas o las buhardillas.

No obstante, a pesar de todas las ventajas que aportan las chimeneas de leña, es necesario tener en cuenta algunos consejos de seguridad para reducir el peligro que implica encender un fuego en casa.

Instalación profesional

Para evitar ciertos riesgos en las chimeneas de leña es importante que todos los elementos estén instalados de forma correcta, así como procurar un mantenimiento adecuado y continuado. Por ello, es fundamental contratar a profesionales que se encarguen de la construcción que garantice un funcionamiento sin ningún problema.

Del mismo modo, durante la instalación se debe realizar un aislamiento sin fisuras de determinadas partes de la casa para prevenir un posible incendio. En este sentido, es primordial que se sigan al pie de la letra las especificaciones del fabricante y las pautas de calidad que establece la normativa en vigor.

Mantenimiento adecuado

Es sumamente importante efectuar un mantenimiento periódico en las chimeneas de leña debido a que la madera cuando arde, emite unas partículas que se van adhiriendo a las paredes del conducto. Si no se deshollina cada cierto tiempo (todos los años si se utiliza a diario en invierno), finalmente se produce lo que se conoce como creosota que es altamente inflamable. No hay que olvidar que lo más recomendable es confiar en un profesional para que lleve a cabo las labores de limpieza.

Si se trata de una chimenea antigua o que lleva mucho tiempo sin encenderse, es necesario realizar una revisión previa para determinar si la instalación es segura o si necesita alguna reforma. En estos casos es bastante común que el conducto esté obstruido, lo cual supone una de las principales causas de incendio.

Utilizar solo leña seca

Una de las primeras normas que se deben tener en cuenta cuando se tiene una chimenea de leña en casa es que el fuego que se enciende no es sinónimo de vertedero. Es decir, hay que evitar siempre arrojar basura, entre la que se encuentran plásticos, maderas tratadas, papeles, cajas de cartón, etc., que pueden desprender gases tóxicos perjudiciales para la salud.

Se recomienda utilizar siempre leñas que estén totalmente secas y que procedan de árboles fuertes. El roble y la encina, entre otras especies, son los más adecuados para las chimeneas, ya que tienen un alto poder calorífico y genera menos humo y hollín. No obstante, es aconsejable no colocar demasiada cantidad de leña para evitar que se produzcan llamas muy altas; en su lugar, es mejor ir manteniendo el fuego con un número reducido de trozos.

Eliminar las cenizas de los fuegos

Después de cada fuego es imprescindible quitar las cenizas que se hayan producido. En esta tarea se debe tener un especial cuidado, ya que, aunque parezca que están apagadas, estas partículas tienen la capacidad de permanecer calientes durante mucho tiempo. Para evitar incidentes, es conveniente humedecerlas antes de tirarlas a la basura.

En cualquier caso, la capa de cenizas en una chimenea de leña no puede ser superior a 2,5 centímetros aproximadamente. En caso contrario, es probable que se produzca más humo durante la quema por la falta de aire que llega a la madera.

Ventilación constante

Aunque el frío del invierno no invita a abrir las ventanas, durante el tiempo que se tenga encendida una chimenea de leña es primordial garantizar una ventilación adecuada. Es necesario que el aire circule constantemente para evitar que el monóxido de carbono aumente de forma rápida, el cual puede causar una intoxicación.

Espacio libre alrededor de la chimenea

Entre las chimeneas de leña y otros elementos de la casa que sean susceptibles de arder fácilmente debe mediar una distancia mínima de seguridad. Este espacio debe ser de al menos dos metros cuando se trata de muebles, cortinas, alfombras, estanterías con libros, etc.

Si se trata de chimeneas abiertas, se debe colocar una puerta o una pantalla para evitar que las chispas del fuego salten hacia fuera. Estas piezas no solo incrementan la seguridad, sino que también aumentan el nivel de calefacción.

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