Claves para tener una cocina más eficiente

Indice de contenidos:

• Uso consciente del agua
• ¿Placa de inducción, vitrocerámica o gas?
• Aparatos conectados en la cocina
• Uso adecuado del horno
• Iluminación sostenible
• Funcionamiento eficaz de la campana extractora
• Ahorrar energía con el frigorífico

La cocina, junto a otras estancias, es una parte esencial de cualquier vivienda, de la que no se puede prescindir. Pero además de importante, este espacio también suele ser el que más energía consume debido a los electrodomésticos que están conectados las 24 horas y al resto que se utilizan a diario. Junto a esto, las tareas que se realizan pueden contribuir de igual manera a caer en un derroche de recursos.

Si llevas tiempo dándole vueltas a cómo se podría convertir tu cocina en un lugar más eficiente, es necesario poner en práctica algunos consejos, pero no solo de forma puntual, sino interiorizarlos para que formen parte de la rutina. Igualmente, no solo basta con poner el foco en el gasto de luz o agua: se debe tener en cuenta que cada detalle cuenta para contribuir en el cuidado del medio ambiente y conseguir ahorrar a final de mes.

Uso consciente del agua

Aunque al abrir el grifo podamos pensar que el agua es infinita, lo cierto es que se trata de un recurso limitado. Por ello, en la cocina se debe hacer un uso responsable del mismo minimizando al máximo las cantidades. En este sentido, los grifos con limitador de caudal son un gran aliado, ya que permiten ahorrar hasta 4 litros por minuto al poderse regular para que no se abran al máximo.

Otro consejo para tener una cocina más eficiente pasa por utilizar agua fría siempre que sea posible. La energía necesaria para aumentar su temperatura, incrementa de forma irremediable el gasto de energía. Además, quienes se muestran más reticentes con el lavavajillas, deben tener en cuenta que consume hasta un 60% menos de agua que cuando se lavan los platos a mano.

¿Placa de inducción, vitrocerámica o gas?

Si ha llegado el momento de renovar esta parte de la cocina, la inducción es, sin duda, la opción más eficiente. Detrás se sitúan los fogones de gas y, en último lugar, la vitrocerámica.

A la hora de cocinar es recomendable utilizar utensilios que tengan un diámetro superior al del fuego. De este modo se puede utilizar todo el calor que se genera, sin que se desperdicie nada. Igualmente, para aportar un punto de eficiencia a la vitrocerámica, se puede apagar 5 minutos antes de terminar de preparar los alimentos para aprovechar el calor residual.

Aparatos conectados en la cocina

En la actualidad es posible encontrar un aparato casi para todo. Sin embargo, antes de realizar una nueva adquisición, es conveniente pensar si realmente es necesario, no solo por el coste que implica sino por el consumo de energía que tendrá durante su utilización.

En caso de que se trate de la compra de un electrodoméstico básico, es importante decantarse por los modelos más eficientes con los que se consigue ahorrar energía en casa. Asimismo, excepto el frigorífico y algún otro aparato, siempre se deben desenchufar cuando no se estén usando, ya que, aunque se encuentren apagados, continúan consumiendo electricidad.

Uso adecuado del horno

Hay que tener en cuenta que el horno es uno de los electrodomésticos de uso puntual que más gasta en la cocina. Por ello, una vez que se enciende es aconsejable aprovechar para cocinar varias cosas, así como apagarlo un rato antes para que el calor que se ha generado termine de dar el punto exacto a los alimentos.

En este sentido también hay que evitar abrir la puerta del horno de forma constante para prevenir que se pierda el calor. Si utilizamos recipientes de cerámica o cristal se contribuye a ahorrar energía, ya que estos materiales ayudan a mantener el calor en mayor nivel.

Iluminación sostenible

Al igual que en el resto de espacios de la vivienda, en la cocina también se debe apostar por la iluminación eficiente. Siempre que no se puedan hacer las tareas con luz natural, las bombillas que tienen un consumo más bajo son las LED. Aunque cuesten más, a largo plazo supone un ahorro considerable en la factura de la luz.

Funcionamiento eficaz de la campana extractora

Estos elementos se encargan de purificar el ambiente en la cocina y eliminar los malos olores. Sin embargo, cuando hay suciedad acumulada en los filtros o conductos, el normal funcionamiento se resiente y se produce un mayor consumo de energía para desempeñar el mismo trabajo. Por lo tanto, es fundamental mantener siempre impoluta la campana extractora.

También hay que evitar abrir las ventanas mientras está funcionando el extractor porque las corrientes de aire pueden provocar un mayor esfuerzo del sistema y ello deriva en un gasto más alto.

Ahorrar energía con el frigorífico

La nevera es uno de los electrodomésticos que debe estar conectado las 24 horas del día y los 365 días del año para que su contenido no se eche a perder. A pesar de ello, es posible contribuir a crear una cocina más eficiente si se selecciona la temperatura adecuada en cada época del año. Lo más aconsejable es poner el frigorífico entre 3 y 7 grados y controlar que esté ubicado lo más lejos posible de las fuentes de calor.

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