Claves para tener un dormitorio más relajante

Indice de contenidos:

• Los colores en el dormitorio
• Ropa de cama confortable
• Los aparatos electrónicos fuera de la habitación
• Un dormitorio limpio y ordenado
• Luz suave para relajarse
• Ventanas aislantes del exterior
• Alfombras que aportan calidez

Es probable que en muchas ocasiones no le demos a la habitación donde dormimos la importancia que realmente se merece. Por norma general, siempre se busca tener un dormitorio lo suficientemente confortable para descansar, aunque crear un ambiente relajante no siempre es una tarea sencilla.

Casi sin darnos cuenta podemos conseguir el efecto totalmente contrario y es que algunas acciones o tipos de decoración interfieren más de lo que pensamos en la conciliación del sueño. Así, recargar con demasiados objetos la habitación, pintar las paredes de colores chillones o no tener la estancia ordenada pueden ser las principales causas de un espacio estresante donde difícilmente se puede descansar.

Lejos de lo que se tiende a pensar, el colchón no es el único elemento fundamental para disfrutar de un mayor reposo durante la noche. Existen otros factores que son determinantes en este sentido, como la iluminación, las sábanas, los colores, las ventanas, etc. Dado que el dormitorio es una de las habitaciones esenciales de la casa, conviene instaurar un ambiente acogedor para recomponer el cuerpo y la mente.

Los colores en el dormitorio

Los colores tienen más importancia en nuestras emociones y estado de ánimo de lo que cabría imaginar. Por ello, en la habitación donde dormimos, lo más aconsejable es escoger tonos neutros donde predominen los blancos, azules, lavandas o grises claros, ya sea para pintar las paredes como en la decoración.

Aunque depende de los gustos de cada persona, a nivel general, los colores fuertes se encuentran en el lado opuesto del relax. Además, optando por tonalidades suaves también se puede conseguir una mayor sensación de espacio.

Ropa de cama confortable

Es cierto que existe una mayor libertad a la hora de elegir las sábanas y las fundas de los nórdicos, aunque lo más aconsejable es que sigan la estética de la habitación para no romper la armonía. No solo hay que prestar atención al diseño, sino que el tejido debe ser lo suficientemente confortable para no entorpecer el sueño.

Al igual que las prendas que utilizamos para vestir, es imprescindible mantener siempre limpia y cuidada la ropa de cama. Si ya está demasiado usada, se debe renovar, ya que con el paso del tiempo va perdiendo suavidad y comodidad.

Los aparatos electrónicos fuera de la habitación

Con bastante frecuencia se suele tener en el dormitorio la televisión, el portátil, la tablet, el teléfono móvil… Aunque en muchas ocasiones es difícil estar desconectado, hay que procurar dejar fuera de esta estancia cualquier aparato susceptible de crear estrés. No hay que olvidar que la habitación es un lugar de descanso, por lo que todo lo que interfiera en el mismo debe quedar al otro lado de la puerta.

Un dormitorio limpio y ordenado

Pocas sensaciones son comparables a dormir en una cama con las sábanas recién lavadas y, aunque parezca una nimiedad, hacerlo en una cama hecha también contribuye a conciliar mejor el sueño. Por lo tanto, entre los consejos que se deben seguir se encuentran lavar las sábanas al menos una o dos veces a la semana, hacer la cama todos los días, ordenar la ropa y el calzado que se haya dejado en la habitación, ventilar la estancia todas las mañanas y eliminar los objetos que sean innecesarios.

Luz suave para relajarse

El sistema de luces en una habitación es fundamental. Así, se debe contar con una iluminación general que alumbre todo el espacio y otra más tenue colocada en las mesitas para leer antes de ir a dormir o encender durante la noche sin molestar demasiado. Esta última luz es la más importante, ya que gracias a ella se consigue crear un ambiente de confort en la habitación.

Ventanas aislantes del exterior

Tanto si la ventana de la habitación da a la calle como a un patio interior o a otra estancia de la vivienda, las ventanas de doble cristal son siempre la opción más acertada. Además de mantener la temperatura del interior, sirven de parapeto del ruido que pueda llegar de fuera garantizando un mayor silencio.

Aprovechando este tipo de aberturas, se pueden colocar cortinas vaporosas que contribuyan a la sensación de confort en el dormitorio. Los mejores tejidos de estos complementos son el hilo, el algodón o el lino con colores o estampados suaves.

Alfombras que aportan calidez

No hay nada más confortable que salir de la cama y apoyar los pies sobre una alfombra mullida que contrarresta la impresión de despertarse. Junto a ello, este tipo de elementos también son un perfecto aliado en la absorción de ruidos, tanto de los que provienen del exterior como de los que se crean en la propia estancia, ya que amortiguan el eco.

Productos relacionados

Limpiador de rodillos de pintura Rulo Pluma Clean Box

Alfombra de ducha baño color beige 54X54

Alfombra ducha plato grande caucho color beige 50X80