Los propietarios de pequeños huertos precisan de maquinaria para el movimiento, volteo y labrado de la tierra. Para este tipo de trabajos nos será indispensable una motoazada o motocultor indicado al uso que lo vayamos a dar. Las motoazadas con motor de gasolina son indicadas para el volteo, aireado y aligerado del terreno reduciendo su compactación y facilitando las posteriores tareas de labranza. Los motocultores sin ambargo, son máquinas más pesadas que tienen varios tipos de aperos de labranza. Entre ellos podemos encontrar fresas para el batido de la tierra, aporcadores para la extracción de tuberculos y arados para la realización de surcos que facilitan la irrigación de los cultivos.
La gran variedad de modelos de motoazadas y motocultores facilitan enormemente un trabajo de por si duro, el batido de la tierra la hace más suave pudiendo trabajar cómodamente. Además al airear la tierra es más fácil que las plantas absorban los nutrientes necesarios para su desarrollo.

Consejos a la hora de elegir una motoazada o motocultor:

• Si la tierra de nuestro huerto es dura y se suele compactar a menudo se debe comprar un motocultor de gran potencia y que sea pesado. Si la maquina elegida no tiene el peso suficiente comenzara a botar en la superficie sin que las fresas hagan su trabajo.
• Adquirir modelos dotados de varias velocidades y marcha atrás.