Las roedoras para corte de metal se emplean en el corte de chapas de diferentes grosores y materiales como el acero, zinc, aluminio, cobre y otros metales. Las roedoras de metal son muy comunes en talleres de chapistería para realizar cortes rectos o complejos diseños con formas curvas. Su uso es muy sencillo y además evita el exceso de temperatura tan común cuando cortamos con amoladoras angulares dotadas de discos de corte abrasivos,  al reducir el calentamiento excesivo del metal se consigue una ausencia de quemaduras de corte en chapas de aluminio lacado.

Consejos para elegir una roedora de metal:

• Aunque suelen admitir diferentes grosores es conveniente que elijamos la máquina más apropiada. En este caso, la ley de lo grande vale para lo pequeño no vale, las roedoras de gran tamaño están destinadas para chapas de alto espesor y no logran un buen acabado en chapas delgadas marcando en exceso los bordes del corte.
• El peso de la roedora de metal es importante, la mayoría de los cortes de chapa se realizan a mano alzada y con una roedora de metal ligera conseguiremos más precisión.
• Existen modelos específicos de roedoras de metal para chapa lisa y chapa ondulada o trapezoidal.
• Asegurase de que la marca que elija ofrezca matrices y troqueles de recambio.